Paso a paso del fraude electoral en Venezuela 

Paso a paso del fraude electoral en Venezuela 

* Al no permitir que los testigos opositores dispusieran de todas las actas de escrutinio, el régimen de Venezuela impidió la sustentación de cualquier reclamo en torno a inconsistencias en el conteo de los votos. 

** El desconocimiento de la voluntad popular podría llevar a una nueva ola de protestas en Venezuela, advierten consultores. 


Expediente Público / Desde Caracas

El anuncio sobre la victoria oficialista en la elección presidencial venezolana comenzó a gestarse al mediodía del domingo 28 de julio. Para ese momento, la lideresa opositora María Corina Machado ni siquiera había votado.  

No obstante, a través de las redes de propaganda oficialista comenzó a divulgarse el resultado de una encuesta a boca de urna (exit poll), efectuada por Hinterlaces, según la cual el candidato a la reelección Nicolás Maduro ya aventajaba a Edmundo González, con 54.57% de los votos, versus 42.82%. 

El Consejo Nacional Electoral (CNE) finalmente dio resultados parecidos, 51.2% contra 44.2%. 

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Fraude en Venezuela: difundir datos falsos

Que Hinterlaces emitiera semejante afirmación no sorprendía. Su máximo representante Óscar Schémel es uno de los consultores preferidos del oficialismo.  

Una de sus encuestas fue usada por la vicepresidenta ejecutiva del régimen, Delcy Rodríguez, para intentar convencer al cuerpo diplomático de que ganarían la elección, durante una reunión convocada de forma intempestiva el lunes 22 de julio. 

Sin embargo, la divulgación prematura del exit poll era una clara violación a la normativa implantada por el propio Poder Electoral dominado por el oficialismo.  

Su máximo rector, Elvis Amoroso, había advertido a los opositores sobre las consecuencias penales de informar sobre cualquier proyección. 

Hinterlaces al mejor postor

En la tarde del domingo, día de la elección, el secretario general de la Plataforma Unitaria, Omar Barboza, rechazó la jugada gubernamental.

Al ser consultado sobre esta situación por Expediente Público sugirió que Hinterlaces se había prestado para una maniobra, en función de sus intereses económicos. 

“Son como las rockolas: suenan cuando uno les mete la monedita”, dijo. 

En el momento de esta conversación, el dirigente político todavía se mostraba confiado en cuanto a que el oficialismo tarde o temprano reconocería la realidad que indicaban los sondeos a boca de urna más confiables. 

Opositores ganaban 

Un trabajo de campo de Gallup e Ipsos dio a Edmundo González 62.5% de los sufragios (8.32 millones de votos), mientras que Maduro solo habría logrado 30.8% (4.1 millones de votos). 

Otra encuesta a boca de urna de Edison Research otorgaba una venta de 65% contra 31% a favor de González. 

“La oposición ganó de forma holgada”, sentenció Barboza. 

En contexto: “Ganamos y todo el mundo lo sabe”. Oposición rechaza resultados del CNE en Venezuela

Pero la jugada oficialista no consistía solamente en cantar victoria por adelantado, también impedía, con amenazas, que sus adversarios difundieran sus propias proyecciones.  

Negar copias de actas de las elecciones en Venezuela

Un elemento clave en esta estrategia consistía en dejar a ciegas al bando liderado por Machado. 

La estrategia diseñada por la líder opositora se fundamentaba en un conteo rápido de los reportes arrojados por las máquinas de votación.  

La tecnología suministrada por la empresa argentina ExClé debe cumplir con el requisito de arrojar tres reportes idénticos.  

En términos coloquiales, los llaman “chorizos” por su forma alargada. Uno de estos documentos debía entregarse a los representantes de la oposición en cada centro, para que hicieran sus conteos independientes.  

En otros procesos electorales, cuando la oposición no contaba con ojos y oídos en cada lugar donde se votaba, el oficialismo podía actuar a placer.  

Pero esta vez, los “comanditos” formados por el Movimiento por la Unidad Democrática (MUD) estaban en las 30,026 mesas. 

"Ganamos y todo el mundo lo sabe". Oposición rechaza resultados del CNE en Venezuela

En vista de ello, Maduro diseñó una estrategia para anular la presencia de los testigos opositores, ya fuese sacándolos por la fuerza de los centros de votación, e incluso de la sala de totalización del CNE.  

Esta situación fue denunciada por la testigo nombrada por Machado ante esta institución, Delsa Solórzano, en la tarde del domingo.  

Señaló que la entidad encabezada por Elvis Amoroso no le dio acceso al lugar donde se hacían los cómputos nacionales, y tampoco a sus dos colaboradores en esta tarea, el abogado Perkins Rocha y María Beatriz Martínez (Primero Justicia). 

Además: Mayoría de Gobiernos denuncian fraude en elecciones de Venezuela

¿Ataque informático? 

Esta elección de circuito nacional, en la que sólo se emitía un voto, el conteo de sufragios debió ser más rápido que en los procesos en los que se eligen a múltiples cargos, como pueden ser el Parlamento, las gobernaciones y las alcaldías.  

Un expresidente del Poder Electoral, Andrés Caleca, indicó que los resultados tenían que estar listos como máximo tres horas después de cerrado el proceso. 

Pero esta vez tampoco sucedió así.  

El primer boletín con los resultados fue dado a conocer por Amoroso pasada la medianoche del 28 de julio, es decir, seis horas después de la finalización de la jornada comicial. Este funcionario, militante del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), argumentó que el sistema de transmisión de datos había sufrido un “ataque terrorista”, y solicitó una investigación al Ministerio Público, también dominado por el oficialismo. 

El primer boletín del Poder Electoral fue divulgado con el 80% de las actas escrutadas. Para ese momento, los opositores solo disponían de 40% de las actas.  

Sin embargo, de acuerdo con Machado, esas actas permitían sostener que Edmundo González había logrado más del 70% de los votos. 

Por otra parte, el 29 de julio, el fiscal general Tarek Saab anunció una investigación contra Machado, como los exiliados Leopoldo López y Léster Toledo, por el supuesto intento de hackeo del centro de cómputos del CNE. 

De interés: Oposición acusa al CNE de paralizar la transmisión de resultados en Venezuela

Disposición a protestar 

El escenario de un resultado fraudulento fue advertido por el director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la Universidad Católica Andrés Bello, Benigno Alarcón.  

En una presentación hecha el 17 de julio había adelantado la posibilidad de que las fuerzas del oficialismo indicaran un resultado que no se ajustaba a la realidad. Pero advirtió que los costos serían muy elevados, incluso a los ojos de su propia militancia. 

¿Cómo explicar de manera creíble que se obtuvo el 51% de los votos, cuando los propios testigos del oficialismo presenciaron la realidad en cada centro de votación? ¿Cómo vender esta misma situación ante los militares, que también estuvieron desplegados en cada lugar donde se sufragó? 

Al momento de la redacción de este informe, los integrantes del comando opositor continúan “armando el caso”, para exigir un reconteo con el 100% de las actas. En este sentido también se pronunció el secretario de Estado norteamericano Anthony Blinken. 

Venezolanos votan masivamente este 28 de julio en Venezuela

Fraude en Venezuela documentado

A pesar de la censura que prevalece en los medios venezolanos, “fraude” es uno de los términos más repetidos. Sobre este particular, Expediente Público conversó con el consultor político Oswaldo Ramírez. 

Cuando ya se percibía el desenlace de la votación, Ramírez recordó que en dos sondeos llevados a cabo en julio se detectó una creciente disposición de la ciudadanía a protestar en las calles, si se llega a la convicción de que la voluntad popular fue desconocida. 

Dijo que en el último trabajo, finalizado el 24 de julio (la misma semana de los comicios), 15.3% de los entrevistados dijo estar “totalmente dispuesto” a tomar las calles “si el CNE anuncia un resultado que se considere irregular o fraudulento”. 

“Con que un 4% de este grupo salga a protestar podrían ocurrir situaciones muy complicadas”, advirtió. 

Este escenario lo conoce el Gobierno. El propio domingo, el militar encargado de coordinar la operación en apoyo al Poder Electoral, general en jefe Domingo Hernández Lárez, anunció que los uniformados se mantendrían desplegados hasta el 15 de agosto, esto es, doce días más que lo habitual para la llamada Operación República. 

El propio domingo, el oficialismo ordenó un despliegue de los uniformados en sectores de la capital y en zonas aledañas. En Los Teques y los Valles del Tuy, donde están las ciudades dormitorio, efectivos de la Guardia Nacional y de policías preventivas tomaron las calles. 

En la noche del domingo, cuando ya se presentía lo que iba a suceder, sonaron las cacerolas en ambos extremos de la capital venezolana.  El descontento comenzó a manifestarse.