* Partidos de oposición rechazaron que Libre presidiera el Consejo Nacional Electoral durante el proceso de elecciones primarias y generales de 2025 en Honduras.
** Analistas y políticos advierten sobre los riesgos de la concentración de poder en manos del partido gobernante en Honduras.
*** El Partido Liberal desautorizó a la consejera Ana Paola Hall negociar la presidencia del CNE con Libre.
Sharon Ardon / Expediente Público
El partido que gobierna Honduras, Libertad y Refundación (Libre), que controla la Corte Suprema de Justicia (CSJ), también intentó presidir un órgano electoral.
En marzo de 2024, Libre trató de garantizar en el Congreso, a través de un pacto con el Partido Liberal, la presidencia del Consejo Nacional Electoral (CNE). Ese control lo tendría en los sufragios generales de noviembre 2025.
Marlon Ochoa, recién juramentado como consejero (o magistrado), confirmó el 11 de septiembre la existencia de un “acuerdo político en el Congreso Nacional, en marzo de este año, cuando se designaron a los nuevos consejeros”.
Ese acuerdo establecía que Ana Paola Hall asumiría la presidencia del CNE durante las elecciones primarias, mientras que Ochoa ocuparía ese rol en las elecciones generales.
Con esto, Libre pretendía asegurar la organización de los comicios previstos para noviembre de 2025 en Honduras.
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“No se puede permitir más concentración de poderes en manos del partido de gobierno (Libre)”, dijo la precandidata a la presidencia por el movimiento “Todo por Honduras”, Maribel Espinoza a Expediente Público.
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Rotación en CNE favorece al partido Libre
Según el Artículo 55 de la Constitución y el Artículo 13 de la Ley Electoral de Honduras, durante la sesión de instalación del pleno del CNE se debe definir quién asumirá la presidencia y cómo se realizará la rotación anual durante el período de cinco años.
La juramentación de las nuevas autoridades fue el 11 de septiembre de 2024, dos días después de iniciar las convocatorias para las primarias de 2025.
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En esta ceremonia, Ana Paola Hall asumió nuevamente su cargo como consejera. Hall quien está en el CNE desde 2019 fue presidenta en dos periodos anteriores (2020-2021 y 2023-2024).
Seguidamente, fue juramentado como consejero representante del partido de gobierno el exministro de la Secretaría de Finanzas (SEFIN) Marlon Ochoa.
Como tercera consejera está la abogada Cossette López, representante del Partido Nacional, quien finalmente fue electa el 13 de septiembre como presidenta del CNE, y en orden de rotación, será sustituida en este cargo por Hall, a partir de septiembre de 2025, y Ochoa en 2026.
López también ocupaba la secretaría en la Junta Directiva del Parlamento Centroamericano (Parlacen). Sin embargo, el Parlacen le dio permiso para asumir en el CNE y regresar como diputada cuando termine su periodo.
Como consejeros suplentes se juramentó a los representantes del Partido Salvador de Honduras (PSH), Karen Patricia Rodríguez y Carlos Enrique Cardona.
Ochoa: hay pacto entre Libre y liberales
Marlon Ochoa causó polémica al reconocer el acuerdo para nombrar a los nuevos consejeros del CNE en el Congreso Nacional.
El Consejo Central Ejecutivo del Partido Liberal (CCEPLH) en una conferencia de prensa, rechazó las declaraciones del Ochoa que asegura la existencia de un pacto entre ambos partidos.
Asimismo, desautorizaron a cualquier miembro del partido a negociar para que Ochoa presida el ente electoral, aunque instaron a Ana Paola Hall buscar la presidencia.
“Reconocemos el riesgo que conlleva que el CNE sea presidido por el representante del Partido Libre, es por eso por lo que exhortamos a nuestra representante en el CNE a buscar la presidencia de ese organismo para las elecciones generales del 2025”, subrayaron.
Prácticas que deben cambiar
Maribel Espinoza, quien actualmente lidera el Movimiento “Todo por Honduras” del Partido Liberal, dijo en entrevista con Expediente Público que desconocía “cualquier acuerdo que se haya llevado a cabo por no haber participado en ninguna negociación con Libre”.
Al tiempo que manifestó que sería poco ético que sea el partido de gobierno quien lidere los procesos electorales en cualquiera de los tiempos, sea en las primarias o generales.
Ante los justificantes que se han promovido de que anteriormente era el partido gobernante quien estaba frente al CNE para las elecciones generales, analizó que “si se ha hecho hasta la fecha no significa que sea una buena práctica, eso debe de cambiar por el bien de la nación”.
Desconfianza por narco escándalo
El reciente video circulado que vincula con capos confesos de la droga a Carlos Zelaya, cuñado de la presidenta Xiomara Castro, encendió las alarmas sobre la infiltración del narcotráfico en la política hondureña.
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Las fuentes consultadas por Expediente Público advirtieron que este escándalo aumenta la desconfianza ciudadana frente al próximo proceso electoral que se avecina.
“Libre está desesperado por mantenerse en el poder debido a los últimos hechos, en consecuencia, hay una desconfianza de los ciudadanos por el actuar de algunos de sus líderes”, manifestó la precandidata por el partido liberal.
Héctor Pérez, analista político, explicó a Expediente Público que quedó en evidencia que Libre tiene nexos con el crimen organizado. Por eso “no amerita tener la presidencia (del CNE) en este proceso electoral”.
“El partido del Libre, más ahora con los narcos videos, prácticamente quedó desacreditado ante el pueblo hondureño y que no tendría derecho a ese cargo”, reiteró.
Fin de extradición afecta proceso electoral
Por su parte, el analista político, Mario Castro señala los riegos de que sea vinculante en Honduras el tratado de extradición. «Deja las puertas abiertas para que el dinero mal habido entre en el proceso electoral”, dice.
El abogado también se refirió a la Ley de Política Limpia, la que considera “un elefante blanco” porque le falta «los colmillos para efectos de amonestación a todos los que utilicen dinero sucio para sus campañas”.
Castro dice que se necesita el apoyo de la comunidad internacional para que sea garante del proceso electoral para que no sea “maquillado de corrupción”.
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Acuerdos sobre intereses de la nación
Analizó, además que lo que “más está afectando la aplicación del Estado de Derechos son los acuerdos políticos”.
Castro afirmó que estos compromisos entre los partidos responden más a intereses personales que el bienestar colectivo.
“Los políticos se ponen de acuerdo para sus propios intereses y no de la colectividad para mantenerse siempre en el poder”, manifestó.
En consecuencia, aseguró que esta dinámica erosiona el Estado Derecho dificultando así la aprobación de reformas necesarias para garantizar transparencia al proceso electoral.
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Diputados parcializan CNE
El analista considera que las autoridades del órgano electoral deberían ser independientes y “alejados de la manipulación de la clase política”.
Señaló que los políticos suelen comprometer a los consejeros, garantizando su elección a cambio de que protejan sus intereses en las elecciones generales. Esto genera un «círculo vicioso» que perpetúa la corrupción.
