* El patrimonio del dictador Daniel Ortega y su familia abarca una amplia lista de activos y se presume en más de USD2,500 millones.
** Ortega, quien se autoproclama el ‘presidente de los pobres’, cuando era candidato presidencial en 2006, declaró que contaba con USD 217,000 en bienes y cuentas.
Expediente Público
Después que Daniel Ortega volvió al poder en Nicaragua en 2007 construyó una fortuna, que algunos medios y economistas cifran en más de 2,500 millones de dólares.
Gran parte de su riqueza personal proviene de la cooperación venezolana, según diferentes investigaciones.
Ortega dirigió miles de millones de dólares durante una década en fondos que entregó Venezuela en el marco del acuerdo de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA).
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Los recursos destinados a proyectos de desarrollo y colaboración entre ambos países habrían sido canalizados por Ortega para fines personales y políticos, coinciden expertos consultados.
“Ellos arrancan su patrimonio importante con el dinero de Venezuela”, señala a Expediente Público el economista y analista político, Óscar René Vargas, uno de los 222 excarcelados políticos desterrados por la dictadura.
Desde 2007 hasta 2018, Venezuela entregó a Ortega USD5,057.8 millones para financiar su proyecto político.
Ortega controló la distribución del petróleo venezolano y adquirió una cadena de gasolineras, delegando a su hijo mayor, Rafael Ortega Murillo, “el administrador de dinero clave detrás de los esquemas financieros ilícitos de la familia”, según el Departamento del Tesoro.
También formó un conglomerado empresarial de Ortega con ayuda de testaferros, sus hijos y nueras que incluye hoteles, medios de comunicación, telefonía, agencias de publicidad y negocios en los sectores energético.
Sin embargo, nadie conoce el monto total de su riqueza ni todos sus negocios.
Daniel Ortega y su red de testaferros
Mencionar una cifra es “muy aventado”, reconoce el economista y excarcelado político desterrado, Juan Sebastián Chamorro.
Además, tampoco se sabe con certeza cuánto de esa fortuna pertenece a su esposa, Rosario Murillo, y a sus hijos.
“Estas personas tienen todo un mecanismo de utilización de testaferros que, probablemente, nunca se vaya a saber el monto total de su fortuna”, explicó Chamorro a Expediente Público.
El abogado José Mojica Mejía y Aura Cecilia Toruño Porras con acciones en DNP-Petronic, y Francisco “Chico” López, el tesorero del FSLN y expresidente del Grupo Albanisa son algunos de los testaferros de la familia.
“Ellos mismos trabajan para ocultar todo esto (…). Esto es parte de una organización mafiosa donde se puede inferir por dónde va la riqueza”, añadió Chamorro.
No hay forma de auditar fortuna de Daniel Ortega
La falta de transparencia y la naturaleza opaca de su administración en el país centroamericano dificultan obtener cifras precisas.
Según el Decreto Ejecutivo 19-2007, que aprobó un mes después de asumir el poder hace 17 años, Ortega tiene un salario mensual de USD3,200.
Investigaciones periodísticas, sin embargo, consideran que Ortega gana al menos USD4,200 mensuales.
Pero ¿Es posible construir un emporio y mantener un estilo de vida como el de la familia Ortega con un salario oficial de USD 3,200 mensuales?
La realidad es que el exguerrillero sandinista, que se autoproclama ‘presidente de los pobres’, amasó una fortuna de USD2,500 millones hasta 2018, según una publicación de Bloomberg Línea, una plataforma de noticias de negocios en América Latina y el Caribe.
“No hay forma” de auditar los bienes de la familia en el poder, reiteró el exdiputado nicaragüense, Eliseo Núñez.
“La Contraloría General de la República es inexistente desde que Ortega volvió al poder”, manifestó.
En Nicaragua, la Contraloría es la entidad responsable de la fiscalización y control del uso de los recursos públicos, así como de recibir las declaraciones de probidad de los funcionarios y supervisarlos.
¿Cuánto declaró tener Daniel Ortega?
Diecisiete años después de su regreso al poder, lo único de probidad declarado por Ortega fue en 2006 cuando era candidato presidencial.
Ese año Daniel Ortega reportó un patrimonio de 217,844 dólares para él y 159,300 dólares para Murillo.
Esa declaración es el único indicio público del patrimonio familiar en los últimos 17 años, un periodo caracterizado por un notable crecimiento en su fortuna personal.
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Por otra parte, “se ve el enriquecimiento acelerado de una familia que ahora tiene una vastísima fortuna”, manifestó Chamorro.
El “control absoluto” sobre todo el aparato público y el Estado, según Chamorro, permitió a Ortega a consolidar su poder de manera total.
¿De dónde proviene la fortuna de Daniel Ortega?
El 11 de enero de 2007, un día después de asumir el poder, Ortega firmó la adhesión de Nicaragua a la iniciativa del ALBA.
La iniciativa venezolana surgió como alternativa comercial y de integración regional para contrarrestar el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA), que promovió Estados Unidos.
“El Supremo Sueño de Bolívar”, obra valorada en USD6,600 millones de dólares, se convirtió en el proyecto más emblemático que no se concretó en el país centroamericano.
El Informe de Cooperación Oficial Externa del Banco Central de Nicaragua revela que, en 2007 Ortega recibió USD185 millones.
En 2008, la cooperación venezolana aumentó a USD457 millones de dólares, un financiamiento vinculado a la colaboración petrolera y a inversiones en el sector energético.
Venezuela, en 2012, realizó el mayor desembolso a Ortega, por un total USD729.3 millones.
Ortega y el negocio de combustible
El “manejo discrecional de la cooperación venezolana” constituye uno de los mecanismos que enriquecieron a Ortega y su familia, afirma Núñez.
“Eso le dio a Ortega la capacidad de manejar dinero al margen del presupuesto y conseguir enriquecerse”, señaló Núñez.
En el esquema de cooperación, aparece Alba de Nicaragua S.A. (Albanisa), conformada por Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y Petróleos de Nicaragua (Petronic).
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Albanisa se transformaría en el corto plazo en una de las empresas más influyentes y grandes de Nicaragua.
La empresa Distribuidora Nicaragüense de Petróleos (DNP-Petronic), tuvo su participación dentro de ese círculo.
Expediente Público en el artículo “Yadira Leets ¿Qué hace en EE.UU., la administradora del imperio petrolero de Ortega?”, reveló que DNP-Petronic importó el 76% y vendió el 39% del diésel y gasolina en el país centroamericano entre 2015 y 2018.
Leets era entonces todavía la esposa de Rafel Ortega Murillo.
A partir de datos oficiales se constató que DNP-Petronic tuvo ingresos por USD1,506 millones en un periodo de cinco años por la venta mayorista de combustibles, donde el Estado de Nicaragua era su principal cliente.
El nacimiento de la “Chayoburguesía”
Según el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, el régimen utilizó Inversiones Zanzíbar S.A., controlada por Rafael Ortega Murillo, el hijo mayor de Ortega y Murillo, para trasferir las ganancias de la venta de combustible a la familia presidencial.
Rafael Ortega Murillo es el “principal administrador financiero detrás de los esquemas ilícitos de la familia Ortega”.
“Hay una clase económica alternativa, que se ha construido desde el poder, y tiene como meta sustituir a la clase empresarial del país”, mencionó Núñez.
Coincide con el estudio del centro de pensamiento Expediente Abierto “El capitalismo de amiguetes”, publicado en octubre de 2024. En este, Vargas describe el nacimiento de la “Chayoburguesía”, una nueva clase económica millonaria “nacida y desarrollada al amparo del régimen”.
“La principal operación de corrupción, enriquecimiento inexplicable y nacimiento de la ‘Chayoburguesía’ fue la privatización del dinero del Convenio Petrolero con Venezuela”, refiere Vargas en su investigación.
A partir de 2015, dos años después de la muerte del entonces presidente venezolano Hugo Chaves Frías (1954-2013), disminuyó la cooperación.
En 2015, el régimen nicaragüense recibió solo USD368.1 millones de la cooperación venezolana.
La fábrica para lavar dinero
Un año antes del estallido de la crisis sociopolítica en el país centroamericano, una auditoría de la prestigiosa firma estadounidense Grant Thornton reveló información clave.
Entre 2016 y 2017, el Banco Corporativo (Bancorp) asumió el control de la administración de los fondos provenientes de la cooperación venezolana que por años administró la Caja Rural de Nicaragua (Caruna).
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Ese dinero entró a Bancorp bajo la figura de fideicomiso que, en materia económica y financiera, es un acuerdo legal donde una persona transfiere bienes a otra para que los administre en beneficio de un tercero.
“Ese dinero de Albanisa es manejado por la familia Ortega Murillo discrecionalmente y Daniel Ortega se enriqueció de eso”, explicó Núñez.
Douglas Farah, periodista estadounidense y consultor de seguridad nacional, en la investigación “La última resistencia de Maduro: La supervivencia de Venezuela mediante la empresa criminal conjunta bolivariana”, expone que Bancorp sirvió como una entidad para lavar dinero.
Bancorp operó como una fábrica para lavar dinero de la “Empresa Criminal Conjunta Bolivariana”, una estructura única, construida con la participación directa del Estado de Venezuela.
Así operó Bancorp hasta que, en abril de 2019, Estados Unidos lo sancionó por ser un “banco utilizado por el régimen de Daniel Ortega para lavar y ocultar dinero de Albanisa” y “refugio para personas sancionadas” por la Oficina de Control de Activos Extranjero (OFAC).
Antes de conocerse las sanciones, los activos del banco en enero de 2019 eran de USD378.5 millones, según la Superintendencia de Bancos y de Otras Instituciones Financieras (Siboif).
Salarios y empresas
El patrimonio del régimen nicaragüense abarca hoteles, fincas agropecuarias, agencias de publicidad, telefonía, empresas eléctricas y de construcción.
A eso se suma más de una docena de medios, entre radios y canales de televisión que son administrados por sus hijos.
Maurice, Daniel Edmundo y Carlos Enrique (Tino) están a cargo de los canales 4, 13, 15 y el estatal Canal 6. Mientras que Juan Carlos Ortega Murillo dirige el Canal 8 y está vinculado a la sancionada agencia de publicidad Difuso.
Las empresas de los hijos de Ortega y Murillo también reciben publicidad estatal, tal y como ha expuesto Expediente Público.
Por otro lado, Camila y Laureano, quienes también son asesores presidenciales, son los rostros más visibles en el clan familiar. Camila junto a su hermana Luciana asisten a Murillo en las actividades públicas.
Al menos cinco de los hijos de la pareja en el poder mantienen cargos públicos, pese a que la Ley de Probidad de los Servidores Públicos (Ley 438) lo prohíbe.
Mara Stotti, Karen Santamaría, Blanca Díaz y Katherine Argeñal, nueras de Ortega y Murillo también trabajan en instituciones del Estado, violando la Ley 438.
Sólo en salario, la familia gobernante recibe unos 65,000 dólares mensuales, estima una investigación periodística del medio Confidencial.
“Es solo un ejemplo de cómo utilizan ese poder del Estado para enriquecerse”, señaló Núñez.
Algunos informes sugieren que su riqueza podría ser significativamente mayor de lo que se ha declarado públicamente. Pero, sin reportes de la Contraloría y el cierre de los registros públicos de propiedad, seguirá siendo un secreto.
