*Ante falta de asistencia a las Juntas Receptoras de Votos, fieles del régimen de Ortega se dedicaron a ir casa por casa para llevar a pobladores a votar incluso bajo amenazas.
** El politólogo Leandro Querido, aseguró que Nicaragua vivió «un velorio cívico» de unas elecciones prefabricadas.
Expediente Público
Aunque el régimen de Daniel Ortega ordenó a sus seguidores en Nicaragua que fueran casa por casa a obligar a la gente a votar en las amañadas elecciones municipales que se celebraron hoy y facilitó autobuses, camiones y camionetas para trasladarlos a las Juntas Receptoras de Votos, todo fue en vano. Solo sus más fieles simpatizantes aparecieron en cortas filas tratando de ocultar el rotundo fracaso de la convocatoria hecha a más de 3.7 millones de personas.
Desde tempranas horas de este 6 de noviembre, la maquinaria del régimen de Daniel Ortega empezó sus funciones de proselitismo a través de sus magistrados y partidos aliados mientras simpatizantes fieles iniciaron la búsqueda desesperada de votantes para llenar las urnas.
Los partidarios sandinistas pidieron a los trabajadores del Estado sus números de teléfono, que se tomaran una foto con el dedo manchado y las subieran a sus redes sociales para verificar que habían votado. A otros los amenazaron con cancelarles la cédula y en las visitas casa por casa, ofrecieron hasta transporte para que la gente fuera a votar.
«A mi ya me vinieron a sacar para ir a votar pero les dije que no iba a ir, entonces el político del barrio me dijo que tenía que ir porque si no me borran del padrón y no me vuelve a salir cédula y la mía la tengo vencida».
«Aquí vinieron a avisarme que ya podía ir a votar, pero les dije que estoy mal de mi pie y que no puedo ir, entonces se ofrecieron a llevarme en microbús, ni como negarse uno porque ya lo tachan de enemigo».
Magistrados a la defensa de urnas vacías
Denis Moncada, canciller de Nicaragua fue una de las primeras figuras fieles del régimen en aparecer con el pulgar manchado. «Venimos a votar libremente en paz, en tranquilidad a ejercer un derecho de todas las personas no importa el partido» dijo Moncada, mientras la cifra de presas y presos políticos supera a más de 200 nicaragüenses recibiendo tortura y tratos crueles.
Por su parte, Lumberto Campbell, que ocupa cargo de magistrado del Consejo Supremo Electoral (CSE), y sancionado por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, dijo estar celebrando una fiesta cívica en normalidad.
«Todas las juntas abrieron en tiempo y forma, todo está normal, el clima está muy favorable y la gente está acudiendo a los centros de votación, estamos seguros que esto es una fiesta cívica» dijo en declaraciones a medios oficialistas ocultando la falta de partidos de la oposición.
Sin embargo, Leandro Querido de Transparencia Actual, dijo a Expediente Público que lejos de ser una fiesta cívica, en Nicaragua lo que hay hoy es un velorio cívico.
«No puede haber nunca una fiesta cívica en un escenario represivo, en un escenario en donde hay presos politicos, donde se violan los derechos humanos y se hicieron reformas electorales restrictivas que atentan contra la participación y que eliminan la alternancia política y la competitividad electoral» argumentó.
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Brenda Rocha, presidenta del CSE, aseguró que «hemos visto la afluencia (de gente) en todos los centros de votación y esperemos que así continúe esta jornada cívica en estas elecciones municipales, estas elecciones soberanas 2022». Sin embargo, la realidad era otra. Calles vacías y centros de votación casi sin votantes fue la tónica del día en todo el país.
«Estamos involucrando a todo el personal del Ejército de Nicaragua en este proceso en los 153 municipios para elegir autoridades municipales» dijo por su parte, el también sancionado por Estados Unidos, Julio Avilés, jefe del Ejército, órgano militar que estos días se ha dedicado a secuestrar a varios opositores.
El observatorio de Urnas Abiertas, denunció la asistencia a las Juntas Receptoras de miembros de la Policía Nacional con armas de fuego, «una clara violación a la Ley Electoral que prohíbe entrar armado al local de las votaciones».
Según el monitoreo de Urnas Abiertas, los reportes han sido recibidos desde diferentes puntos del país.
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Búsqueda de votos para «efectos de control»
Ante la evidente ausencia de ciudadanos en juntas receptoras de votos, Campbell manifestó que es por el nuevo «método modernizado» que facilita la revisión y orientación a los ciudadanos a través de los kioskos tecnológicos.
Sin embargo, durante la cobertura especial de Expediente Público se ha podido constatar la ausencia de habitantes en los centros de votación de los departamentos de Carazo, Masaya, Rivas, Managua y Estelí.
De la ciudad de León, circula un video en el que un allegado al régimen pide los datos de contacto de una ciudadana, hora en la que llega a votar y le pide que envíe una foto con el dedo manchado, justificando que es para «efectos de control».
Alcaldes aliados de unas elecciones ¨fake¨
Para el politólogo de Transparencia Actual, Leandro Querido, cuando los partidos politicos de la oposición son intervenidos, y tampoco hay una autoridad electoral competente, profesional e independiente, son claras condiciones de nula integridad electoral.
«Está bastante fluido, se ve que población quiere un cambio, esperamos en Dios porque la decisión está en las manos de Dios no en las personas, nosotros hacemos lo que está en nuestras manos pero Dios hace lo imposible», dijo sorpresivamente Ruth Cerda, quien es candidata a Alcaldesa en Managua por el Partido Liberal Constitucionalista, luego de haber votado.
El politólogo, Querido, calificó este proceso como «elecciones prefabricadas» donde «es imposible que el oficialismo pierda».
«Las elecciones propias de totalitarismos y de los autoritarismos tienen que ver con este concepto de elecciones fake o prefabricadas en donde los resultados ya se saben, donde la autoridad electoral como apéndice del poder ejecutivo maneja todos los resortes del sistema electoral» argumentó Querido, insistiendo en que «no vamos a tener resultados verificables».
«En un escenario de elecciones prefabricadas es imposible que el oficialismo pierda, son elecciones sin sorpresa», concluyó.
