Artículos en medios de comunicación, menciones en reportes nacionales e internacionales de derechos humanos, secretos a voces. Sobre las violaciones sexuales en el marco de los secuestros, arrestos y encarcelamientos contra manifestantes opositores se escuchaba mucho en Nicaragua desde abril de 2018.
El 11 de septiembre de 2020 un tribunal de conciencia de la Fundación Arias determinó que este tipo de actos habían sido cometido en el marco de la represión estatal nicaragüense, y no solo eso. Las juezas dijeron que el Estado era culpable de crímenes de lesa humanidad al usar estos agravios como método de tortura.
Las violaciones sexuales no fueron actos esporádicos, determinó el tribunal de conciencia, fueron acciones sistemáticas y organizada.
Lo peor, la tortura sexual se sigue cometiendo en Nicaragua, revelan denuncias de diferentes organizaciones.