*En su visita a Costa Rica, la primera a Latinoamérica de Antony Blinken como secretario de Estado, reforzó la postura de Estados Unidos sobre las sanciones al gobierno de Daniel Ortega y la crisis de refugiados nicaragüenses.
**Jefe de la diplomacia de Estados Unidos advierte sobre cambios en regímenes de la región o continuación de las políticas de sanciones, mientras gobierno sandinista excluye a Cristiana Chamorro de la contienda electoral
Expediente Público
“La eliminación de sanciones siempre está disponible para entidades, gobiernos y personas que tomen medidas considerables para restaurar el orden democrático, para aquellos que se nieguen a participar en violar los derechos humanos, para aquellos que hablen en contra abusos cometidos por las autoridades”, manifestó el secretario de Estado, de Estados Unidos, Antony Blinken en su visita oficial Costa Rica.
El jefe de la diplomacia de los Estados Unidos (EE. UU.) llegó a San José el 1 de junio, en una gira de dos días a ese país centroamericano.
Ver vídeo aquí: Antony Blinken se pronuncia sobre sanciones contra Nicaragua y Venezuela.
Junto al presidente costarricense Carlos Alvarado, respondió preguntas de periodistas al concluir una reunión bilateral previa a una cita con los cancilleres del Sistema de a Integración Centroamericana (SICA), a la que también fue invitado el ministro del Exterior de México, Marcelo Ebrard. El canciller nicaragüense, Denis Moncada, viajó este martes a San José, la capital de Costa Rica, para el primer encuentro con el subsecretario de Estado del gobierno de Joe Biden.
“Las sanciones no son permanentes, apuntan a generar cambios positivos en la conducta y acciones del gobierno o individuos”, explicó Blinken, ante la consulta de una periodista al presidente Alvarado y al secretario de Estado, sobre si disminuir las sanciones aliviaría el éxodo de nicaragüenses y venezolanos.
Cambios o sanciones
“La respuesta más importante a la pregunta en lo que respecta al sufrimiento de venezolanos o nicaragüenses es que sus gobiernos deben hacer lo correcto y abordar las inquietudes de sus pueblos, y respaldar la democracia, los derechos humanos y los valores que estos países asumieron, por ejemplo, en la Carta Interamericana”, sostuvo el jefe de la diplomacia de Estados Unidos.
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El presidente Alvarado reiteró que en la reunión bilateral abordaron el fortalecimiento de las instituciones democráticas, “ese fue el énfasis para el trabajo en la región”.
El gobierno de Estados Unidos bajo la anterior administración del expresidente Donald Trump, impuso sanciones económicas selectivas a funcionarios e instituciones de los regímenes de Nicolás Maduro en Venezuela y Daniel Ortega en Nicaragua, acusándolos de lavar dinero y activos, corrupción y violación de derechos humanos.
“En Venezuela las sanciones apuntan a los responsables de los abusos, tienen elementos muy importantes para que la asistencia humanitaria pueda continuar, inclusive mientras las sanciones se mantienen contra los que abusan de los derechos humanos y socaban la democracia”, precisó Blinken.
Agenda regional
La buena gobernanza es fundamental para enfrentar los retos y aprovechar las oportunidades del momento, razonó el funcionario de alto nivel de Washington en su primer contacto directo con Centroamérica.
Sin embargo, agregó, “nos reunimos en un momento que la democracia y los derechos humanos se ven socavados en muchas partes de la región (Centroamérica), vemos esto en la erosión de la independencia judicial, medidas represivas sobre medios de comunicación y ONG y la prohibición a la oposición y partidos políticos, y el sofocamiento de las labores contra la corrupción”, sostuvo Blinken, sin referirse al gobierno nicaragüense.
Pero en lenguaje diplomático, se interpreta que su mensaje estuvo orientado a la situación de Nicaragua, donde el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo en pleno proceso electoral, con el control que tiene en el Consejo Supremo Electoral (CSE), inhibió a partidos políticos para eliminar candidatos y abrió una polémica investigación por lavado de dinero y activos contra la precandidata presidencial Cristiana Chamorro, fundadora y exdirectora de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro (FVBCH), en la que también pretende criminalizar a periodistas y medios de comunicación independientes.
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Excluyen a Cristiana Chamorro
Para ello, el Ministerio Público (Fiscalía) bajo control absoluto del gobierno sandinista apresó a Marco Antonio Fletes y a Walter Gómez, excontador y exadministrador de la clausurada fundación, respectivamente, además acusó a otros extrabajadores y llamó como testigos a decenas de periodistas y personajes políticos en el país centroamericanos. Entre los citados para «entrevista» se incluyó a Sergio Ramírez, escritor y exvicepresidente (1985-1990), como representante de la Fundación Luisa Mercado, que desarrolló varios convenios con la organización.
El proceso, que ha causado críticas de sectores opositores nicaragüense, organismos como Naciones Unidas y Estados Unidos, por los vacíos legales de los argumentos y procesos de intimidación, dio pie a que la Fiscalía acuse este 1 de junio a Cristiana Chamorro por gestión abusiva y falsedad ideológica junto a lavado de dinero, bienes y activos. Con ello, según la Fiscalía, solicitó se le inhabilite para participar en elecciones para cargos públicos y se ordene restricción migratoria en contra de la precandidata presidencial.
Las medidas ocurren horas después que Chamorro, también periodista, se inscribió como precandidata presidencial en la Alianza Ciudadanos por la Libertad, el último partido político de la oposición nicaragüense que busca enfrentar a Ortega en los grises comicios del 7 de noviembre próximo.
A la periodista María Lilly Delgado, corresponsal en Managua de la cadena Univisión , y los extrabajadores de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro, Lourdes Arróliga y Guillermo Medrano, se les impuso retención migratoria para “evitar que evadan el proceso investigativo, prohibición de concurrir a determinadas reuniones y de comunicarse con las personas investigadas”, comunicó la Fiscalía.
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Temas de la visita
Además del tema de gobernanza, la agenda del secretario de Estado norteamericano tocará, primero, el hecho que la región está cada vez más vinculada con Estados Unidos, como se ve en la crisis climática, la lucha contra la Covid-19 y la delincuencia organizada, la cooperación internacional, entre otros.
Blinken también señaló que debía plantearse un crecimiento económico inclusivo como lo espera la población, no solamente por mediciones de Producto Interno Bruto (PIB) y el sector bursátil: “debemos tomar en cuenta a los trabajadores, concentrarnos en nuestros pueblos”.
El gobierno del mandatario Joe Biden tiene previsto una inversión sin precedentes en Centroamérica, US$7,000 millones, particularmente en el Triángulo Norte, (Honduras, El Salvador y Guatemala) que se enfocará en todas las personas, no solo los acomodados, indicó. Nicaragua no forma parte de ese proyecto.
“Debemos brindar crecimiento con equidad, es la manera de brindar a las personas esperanzas de tener en su comunidad una mejor vida, de no ser así podrían caer en manos de los coyotes que los llevan a otros países, incluyendo a Estados Unidos”, agregó el secretario de Estado en el inició de su visita en Costa Rica.
El segundo tema está relacionado con los retos de seguridad, incluyendo la delincuencia transnacional y cooperación contra el terrorismo: “hay muchas razones para fortalecer el trabajo”, indicó Blinken, al ser cuestionado por el incremento de la ayuda militar a la región con graves problemas de corrupción e institucionalidad.
El mandatario Alvarado indicó que Costa Rica podría ser importante aliado para encontrar soluciones a los problemas de la región centroamericana.
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Ayuda para los refugiados
En cuanto a los refugiados en Costa Rica, Blinken prometió mayor asistencia técnica y a la vez, aplaudió la generosidad de los costarricenses por la ayuda a venezolanos y nicaragüenses, estos últimos con vínculos muy estrechos desde hace muchos años con su vecino centroamericano.
“Vemos una sociedad muy generosa en Costa Rica, hemos incrementado la asistencia que brindamos para cuidar y atender las necesidades de desplazados forzosos”, brindando asistencia, tal como lo anunció la vicepresidenta Kamala Harris, quien incrementó en 28 millones de dólares la ayuda en esta área, dijo el secretario de Estado de EE.UU.
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El presidente de Costa Rica expresó que su país es receptor de migración y refugiados, desde 2019, con ayuda de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Secretaría para las Migraciones y Refugio, desplegó un plan para atender a esa población, un área de interés para su país y Estados Unidos. Como consecuencia de la crisis social y política en Nicaragua debido a la represión a las manifestaciones sociales en 2018, se calcula que unos cien mil nicaragüenses migraron a Costa Rica.
Agenda bilateral
Alvarado indicó que durante la reunión con Blinken discutieron temas relacionados con valores comunes entre San José y Washington como los derechos humanos, progreso enfocado en las personas y el multilateralismo.
Algunos de los retos en la relación bilateral y en la región abordados fueron la lucha contra las drogas, sostenibilidad ambiental y lucha contra el cambio climático, procesos de integración o comercial, la lucha contra la pandemia y la recuperación pos pandemia.
“No es accidental que estemos aquí, tenemos una reunión con nuestros socios del sistema de integración centroamericana, Estados Unidos y Costa Rica están unidos en una alianza basada en valores compartidos con respecto a temas que enfrentan nuestros pueblos hoy, en momentos de grandes retos”, agregó Blinken.
Estados Unidos y Costa Rica tienen un balance comercial de 11,000 millones de dólares, incluyeron temas sobre desarrollo, descarbonización y lucha contra delincuencia organizada.