* Estados Unidos logra que el régimen de Daniel Ortega excarcele a la mayoría de los presos políticos, incluidos los líderes evangélicos del grupo Puerta de la Montaña.
* Washington califica como «verdadera mezquindad y crueldad» la captura de personas acusadas por motivos que no deberían significar años de cárcel.
Expediente Público
La dictadura de Daniel Ortega excarceló y desterró a 135 presos políticos en Nicaragua. La liberación se logró gracias a las negociaciones del Gobierno de Estados Unidos, según confirmó la Casa Blanca mediante un comunicado emitido este 5 de septiembre de 2024.
«La administración Biden-Harris logró hoy la liberación de 135 presos políticos detenidos injustamente en Nicaragua, por razones humanitarias», resalta el Gobierno estadounidense.
El grupo de presos políticos desterrados fueron enviados a Guatemala en un vuelo que arribó después de la medianoche al Aeropuerto La Aurora. En febrero de 2023, el régimen de Ortega-Murillo excarceló a 222 ciudadanos, que integró a la primera agrupación de nicaragüenses expatriados.
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Presos políticos desterrados a Guatemala
La Casa Blanca resaltó el «liderazgo» del presidente guatemalteco Bernardo Arévalo «al abordar cuestiones humanitarias y defender la libertad democrática».
Arévalo confirmó la participación de su Gobierno como muestra de «su firme convicción democrática, que rechaza rotundamente las amenazas de regresión autoritaria».
«Hoy reafirmamos ese compromiso y damos de vuelta la solidaridad internacional que tantas veces hemos recibido, acogiendo a 135 hermanos nicaragüenses, presos políticos liberados. Solo en libertad, la democracia, la vida y la humanidad florece», publicó el presidente en redes sociales.
Esta es la segunda vez que Estados Unidos logra que la dictadura de Ortega libere a las personas presas políticas.
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En febrero de 2023 fueron sacados de la cárcel 222 presos, entre ellos siete exprecandidatos presidenciales, que arribaron desterrados a Estados Unidos. Los expatriados llegaron en un vuelo privado de Managua al Aeropuerto Internacional de Dulles, en Virginia, en las cercanías de Washington, D. C.
«Nadie debería ser encarcelado por ejercer pacíficamente sus derechos fundamentales de libre expresión, asociación y práctica de su religión», condenó Washington este jueves.
«Mezquindad y crueldad del régimen»
El subsecretario de Estado Adjunto para América Central de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental en el Departamento de Estado, Eric Jacobstein, condenó la crueldad del régimen nicaragüense, tras encabezar una conferencia con la prensa internacional.
“La verdadera mezquindad y crueldad del régimen se mostró al presentar a individuos por cosas que, obviamente, no tienen ninguna razón de estar en prisión”, fustigó Jacobstein.
“Escuchar sobre el trato a las personas en prisión también fue muy inquietante. Esto sigue reflejando nuestras preocupaciones sobre este gobierno”, agregó el funcionario estadounidense.
“EE. UU. está proporcionando asistencia para apoyar a estas personas en las próximas semanas y meses”, afirmó.
Liberan a líderes evangélicos de Puerta de la Montaña
Entre los 135 ciudadanos nicaragüenses liberados este 5 de septiembre están los 13 miembros de la organización evangélica Puerta de la Montaña (Mountain Gateway en inglés), con sede en Texas.
Los evangélicos fueron condenados a entre 12 y 15 años de cárcel, y a pagar 880 millones de dólares. El régimen los acusó de lavado de dinero, delitos que fueron rechazados por la congregación religiosa.
El grupo también incluye a «laicos católicos, estudiantes y otras personas a quienes Daniel Ortega y Rosario Murillo consideran una amenaza para su régimen autoritario».
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De acuerdo al comunicado, a los desterrados nicaragüenses «se les ofrecerá la oportunidad de solicitar formas legales de reconstruir sus vidas» a través del programa «Oficina de Movilidad Segura», impulsada por la administración Biden-Harris.
Este es el programa para refugiados que patrocina Estados Unidos desde terceros países, con el fin de evitar la migración irregular.
Estados Unidos insiste al régimen de Ortega a que «cese de inmediato el arresto y la detención arbitrarios de sus ciudadanos por el mero ejercicio de sus libertades fundamentales».