*Caída notable de la Inversión Extranjera Directa de China en América Latina, sostiene investigación.
**China está enfocando su inversión en áreas claves como la energía, las tecnologías de la información y comunicaciones, reporta Diálogo Interamericano.
Expediente Público
China redujo sus inversiones en América Latina en los últimos cuatro años, producto de la recalibración de las prioridades del régimen comunista y sus empresas en el extranjero, revela una investigación del centro de pensamiento Diálogo Interamericano.
La inversión china alcanzó los 14,200 millones de dólares anuales entre 2010 y 2019, pero cayó hasta un promedio de 7,700 millones de dólares de 2020 a 2021, y luego a 6,400 millones de dólares en 2022, reporta el centro con sede en Washington DC.
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El informe cita que la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) encontró que las adquisiciones chinas de activos en esta región en 2022 fueron las más bajas en una década, tanto en el número de proyectos como en porcentaje del total de fusiones y adquisiciones en la región. Colocándose detrás de las empresas de Estados Unidos, Australia, la Unión Europea, Canadá y Chile.
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Sin embargo, el fenómeno no sólo es regional. La red de servicios profesionales EY estimó el valor de la inversión total anunciada por China en todo el mundo durante 2022, en 29 mil millones de dólares, lo que representó una caída interanual del 52 por ciento.
Los analistas atribuyeron esta caída a las crecientes tensiones geopolíticas, el endurecimiento regulatorio relacionado y el aumento de la inflación global, entre otros factores.
El reenfoque de negocios chinos
El estudio “Nueva infraestructura: Tendencias emergentes en la inversión extranjera directa china en América Latina y el Caribe”, fue realizado por los expertos de Diálogo Interamericano Margaret Myers, directora del Programa Asia y América Latina, Ángel Melguiz y Yifang Wang, ambos del Programa Asia y América Latina.
Los analistas indican que China se enfoca ahora en otras áreas prioritarias que describe como «nueva infraestructura», estas son industrias, telecomunicaciones, tecnología financiera y transición energética, por ejemplo, que están ampliamente relacionadas con la innovación, pero también, son una parte crítica dentro de la propia estrategia de crecimiento económico del país asiático.
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“Ya sea en términos de valor o número de acuerdos, la Inversión Extranjera Directa (IED) china en estas industrias está en aumento, representando el 58 por ciento (alrededor de 3,700 millones de dólares) del total anual de la IED china en la región en 2022 y más del 60 por ciento del número total de acuerdos de IED anunciados por las empresas chinas ese año”, señala el informe.
Los expertos de Diálogo Interamericano señalan que, en general, los tipos de proyectos de infraestructura a gran escala que una vez caracterizaron la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI), ya no son tan emblemáticos dentro de la política china de inversión extranjera en América Latina y el Caribe (ALC).
“En muchas partes de la región, el interés chino en los canales, el ferrocarril y otras infraestructuras importantes de transporte y energía está siendo reemplazado por un creciente énfasis en la innovación, ya sea en la tecnología de la información y la comunicación (TIC), la energía renovable u otras industrias emergentes, en consistencia con el enfoque láser de Beijing en su propia mejora económica y la competitividad global”, subraya el informe.
El estudio del Diálogo Interamericano advierte que las empresas chinas en muchos casos buscan un mayor compromiso con América Latina y el Caribe, pero a través de acuerdos más pequeños en promedio, y en sectores que están directamente alineados con los propios objetivos de crecimiento económico de Beijing.
El sector energía
Las fusiones y adquisiciones chinas en la región ahora se limitan, principalmente, a las industrias de generación y transmisión de electricidad que son servicios públicos.
Luz del Sur, la empresa de servicios públicos más grande de Perú, responsable de suministrar electricidad al sur de Lima y alrededores fue comprada por China Yangtze Power International (Hong Kong).
En Chile, China Southern Power Grid compró participación en la empresa de transmisión de energía Transelec en 2018 y State Grid compró la distribuidora de energía Chilquinta Energía en 2019 y CGE en 2020.
En total, los acuerdos de generación y transmisión de electricidad representaron casi el 74.4 por ciento del total de transacciones de fusiones y adquisiciones en los últimos cinco años y una cantidad significativa (U$16.9 mil millones) del total chino.
El enfoque de China en la energía renovable, una industria relacionada con la innovación, representando más del 6 por ciento del valor total de los anuncios de IED de América Latina y el Caribe entre 2018 y 2023.
Tecnologías de la Información y Comunicaciones
Además, China apuesta a inversiones en las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) en la región. Los acuerdos en este sector representaron un considerable 40 por ciento del total de IED china en América Latina entre 2018 y la primera mitad de 2023, aunque en términos generales, sólo representa el 8 por ciento del valor total de las inversiones chinas a nivel mundial.
El informe detalla una tendencia al alza de la IED china en las industrias de “nueva infraestructura” de América Latina, donde las TIC, la tecnología de energía renovable y, cada vez más, los vehículos eléctricos representan la mayor parte de estas inversiones.
El estudio indica que las condiciones en ALC están relativamente maduras para la inversión china en TIC, incluida una base sustancial de consumidores con altos niveles de demanda de equipos y servicios digitales asequibles.
“Ya sea en términos de valor o de número de acuerdos, la IED china en estas industrias está aumentando y representó el 58 por ciento (alrededor de 3,700 millones de dólares) del total anual en la región en 2022 y más del 60 por ciento del número total de acuerdos de IED. anunciado por empresas chinas ese año”, determina el informe.
También hay inversiones nuevas en equipos, electrónica de consumo, satélites, servicios e informática, por ejemplo.
“Como las condiciones geopolíticas limitan las inversiones en tecnología y las perspectivas comerciales de China en los mercados de los países desarrollados, muchas de las empresas manufactureras y de TIC de China han tratado de involucrarse más ampliamente con ALC y otras partes del Sur Global”, dice el reporte.
El estudio concluye que los principales proveedores de tecnología de China están yendo más allá de las ventas de equipos, que fueron la base original de las operaciones de Huawei en América Latina y ahora están ampliando rápidamente su enfoque para incluir centros de datos, computación en la nube y otros servicios, especialmente en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Perú.
Enfoque en los más grandes
El estudio de Diálogo Interamericano señala que la inversión de China sigue estando abrumadoramente centrada en las economías más grandes de la región como es el caso de Brasil que ha absorvido gran parte de la IED china en ALC entre 2003 y 2010.
En 2022 China también apostó a Brasil con 78,600 millones de dólares, el 42 por ciento del total de toda América Latina.
“La IED china en Brasil entre 2003 y 2022 fue más del doble de la inversión en Perú, el segundo mayor receptor de IED china durante ese período”, explica el informe.
Sin embargo, la importancia relativa de Brasil como destino de la inversión china ha disminuido algo en los últimos cinco años, a favor de Chile, Perú y México. El informe señala que esto posiblemente sea un reflejo de las tensiones políticas entre China y Brasil bajo la administración de Jair Bolsonaro, pero también puede deberse a cambios en las condiciones de inversión o proyectos o industrias de interés en otras partes de ALC.
La advertencia estadounidense
El informe recuerda que Estados Unidos y algunos socios con ideas afines han advertido sobre la dependencia excesiva de la inversión china e influencia en toda la “pila digital” (infraestructura de red, dispositivos, aplicaciones, contenido y gobernanza), destacando la necesidad de interoperabilidad y señalando la perspectiva de reutilizar las tecnologías e infraestructura digitales para permitir la supresión de la sociedad civil.
En América Latina y el Caribe, Estados Unidos ha pedido marcos sólidos de protección al consumidor para reducir el espacio para la impunidad y el abuso de derechos, ya sea a instancias de actores estatales o no estatales.
¿Darán más a la region?
El informe manifiesta que China está dando señales de que penetrará más en la región y como muestra de ello cita las conversaciones de Xi Jinping en noviembre de 2023 con los presidentes Dina Boluarte de Perú, Luis Lacalle Pou de Uruguay y Gustavo Petro de Colombia, y su reunión de abril de 2023 con el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva.
Esas reuniones se centraron todas en ampliar las ya extensas relaciones comerciales, al tiempo que alentaron la cooperación en sectores relacionados con la innovación en estos países, incluidos los sistemas de movilidad urbana en Colombia, el sector farmacéutico en Uruguay, la economía digital, la energía y la minería en Perú, y la tecnología telefónica 5G en Brasil, entre otras áreas.
Según los expertos, estos y otros países de la región deberían esperar cierto grado de compromiso económico chino en los próximos meses y años, aunque principalmente en sectores que están alineados con el propio proceso de mejora económica de China, y no precisamente, América Latina y el Caribe.