*Tras 19 días de negociaciones, las bancadas que conforman el Congreso Nacional concretarán este 15 de febrero el pacto nombrando a los nuevos 15 magistrados de la Corte Suprema de Justicia para el período 2023 –2030.
**Según algunas estimaciones, Libre tendrá seis magistrados, el Partido Nacional cinco y el Partido Liberal cuatro, alejando la posibilidad de tener una CSJ independiente.
***Eric Olson, director de políticas e iniciativas estratégicas de la Fundación Internacional de Seattle, expresó a Expediente Público que, si la elección de los magistrados es más política que técnica, “se hará mucho más difícil la tarea de traer a una CICIH”.
Yarely Madrid / Expediente Público
Un escenario de continuismo político se apodera de la elección de los 15 magistrados que conformarán la Corte Suprema de Justicia en Honduras, con la diferencia que el bipartidismo histórico entre el Partido Liberal y Nacional, se romperá ahora con representantes del partido de Gobierno Libertad y Refundación (Libre).
Alrededor de 19 días han pasado desde la primera reunión de los 128 diputados que conforman el Congreso Nacional, el 25 de enero. Las negociaciones se concretaron el lunes 15 de febrero dándose a conocer con una conferencia de prensa en la que los jefes de los partidos políticos anunciaron un consenso para elegir a los magistrados en un cuarto intento, hoy 15 de enero a las 5:00 de la tarde.
De acuerdo a los congresistas la nómina propuesta para realizar la votación en el hemiciclo desde hace tiempo estaba consensuada, lo que atrasaba el proceso, era llegar a acuerdos sobre qué partido político dirigirá la Corte Suprema de Justicia, una situación que, según el jefe de la bancada del Partido Nacional, Tomás Zambrano, llegó a su fin con el Partido Liberal.
Una lista previa a la elección, integrada a partir de los candidatos nominados por cada bancada, muestra en números que Libre tendría seis magistrados en la Corte, el Partido Nacional cinco y el Partido Liberal Cuatro. Sin embargo, la nómina del Partido Liberal esconde un contexto que para muchos podría ser favorable para Libre.
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En Jaque la presidencia de la Corte
En horas de mañana de este 14 de enero el jefe de la bancada del Partido Nacional, Tomás Zambrano informó a la prensa que el consenso que se había logrado entre los tres partidos (Liberal, Nacional y Libre)l9 fue gracias al Partido Liberal, algo que confirmó el diputado de ese partido, Marlon Lara.
“Nosotros aceptamos bajarnos de cinco a cuatro magistrados si la presidencia de la Corte Suprema de Justicia recae sobre uno de los cuatro miembros del Partido Liberal. Por la polarización que hay entre el Partido Libre y el Partido Nacional, yo creo que el pueblo hondureño se sentiría tranquilo si ese poder lo preside uno de los candidatos propuestos por el Partido Liberal”, dijo el diputado de ese partido, Marlon Lara.
Según Zambrano, el Partido Nacional aceptó la nómina del Liberal porque “esto quiere decir que con esta elección la oposición somos mayoría, estamos hablando de cuatro liberales y si nos llegará a fallar uno hay tres, más cinco (del Partido Nacional), tendríamos ocho.
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¿Qué hay detrás de la nómina del Partido Liberal?
El congresista se alegró de que el Liberal haya incluido en su nómina al actual Fiscal Adjunto del Ministerio Público, Arturo Bueso Sibrián, quien desde el inicio figuró entre las dos nóminas del Partido Nacional, en las sesiones legislativas del 10 y el 12 de febrero.
La familia de Sibrián y él ha estado muy ligado al Partido Liberal, de hecho, su hermano, Francisco Sibrián Bueso fue diputado suplente. Además, el fiscal actualmente es el secretario de finanzas del partido.
No obstante, el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) lo ha señalado por ser la mano derecha del fiscal general, Óscar Fernando Chinchilla y contribuir a varios casos de impunidad en Honduras.
Chinchilla fue acusado por la Comisión Especial de Extradición, designada por el Congreso Nacional por supuestamente engavetar casos de alto impacto relacionados con el narcotráfico.
Otro candidato que resalta es Milton Danilo Puerto, quien, a pesar de ir en la nómina de los liberales, formó parte del gobierno de expresidente Manuel Zelaya Rosales (2006-2008, como canciller de la República.
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De hecho, se le ha considerado uno de los hombres más cercanos al expresidente Zelaya, pues incluso en sus declaraciones públicas muestra su apoyo a los Castro Zelaya.
Más de lo mismo
“Estamos frente a un tradicionalismo político en donde los mismos de siempre deciden”, denuncio a Expediente Público la diputada del Partido Salvador de Honduras, Maribel Espinoza.
“Los partidos nominan a las personas que consideran de su mayor confianza ese ha sido el esquema tradicional y ese es el que se está siguiendo y al final lo que están repartiéndose el poder en números”, manifestó.
Hace siete años, la elección de la Corte también se llevó a cabo bajo un esquema político y no de idoneidad para los cargos. En esa ocasión se disputaban los cargos el Partido Nacional y el Liberal.
La elección se extendió por tres semanas, luego de que algunas bancadas denunciaran vicios en el proceso y la distribución de los candidatos.
Fue hasta luego de seis intentos cuando lograron llevar a cabo la elección de los 15 magistrados, el 11 de febrero del 2016. En ese momento fue cuando Rolando Argueta fue declarado presidente de la Corte Suprema de Justicia, quien se ha declarado públicamente como filial al Partido Nacional.
Hoy se vuelve a repetir el patrón, solo que ahora con Libre encabezando la lucha de poder.
La Corte Suprema que sirve a Manuel Zelaya
A criterio del designado presidencial, Salvador Nasralla, el presidente de la Corte será de Libre porque “tiene 10 votos, tiene los cuatro del Partido Liberal y los seis de Libre y ellos son lo mismo”.
“La Corte en Honduras al ser electa por delincuentes, o sea, la mayoría de congresistas son delincuentes, por tanto, no se puede pretender tener una corte independiente si la mayoría que la eligen son corruptos. O sea, una corte limpia en Honduras, no se puede elegir en Honduras y no se podrá elegir nunca en Honduras”, criticó Nasralla en declaraciones a Expediente Público.
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Así se reparten Libre y Nacional la Corte Suprema
Una de las situaciones trascendentales era lograr tener una corte independiente del partido de Gobierno, para abrirle paso a la Comisión Internacional Contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (CICIH), liderada por la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Traer a la comisión para que investigue casos de corrupción e impunidad, fue una de las promesas de la presidenta Xiomara Castro.
Sin embargo, de acuerdo a Eric Olson, director de políticas e iniciativas estratégicas de la Fundación Internacional de Seattle, “a medida que se producen resultados en base a negociaciones políticas, debilita la impresión de la comunidad internacional del proceso”.
“Este proceso tiene que llevar a la elección de personas éticas que tienen las capacidades necesarias técnicas y no debe ser decidido en base de un filtro político partidario”, explicó a Expediente Público el experto en temas de Centroamérica.
“No me atrevería a imaginar qué decisión van a tomar ellos (ONU). Simplemente diría que, si el proceso no es totalmente transparente, (y) es más político que técnico, hace mucho más difícil la tarea de traer a una CICIH”.
Olson duda que Naciones Unidas apoye la CICIH, “si el sistema de Justicia de Honduras está politizado” porque entonces, su trabajo la investigar la corrupción se enfrentaría a obstáculos como en el pasado.
Última esperanza
Otro tema que está pendiente, es la elección de la Fiscal General y el Fiscal General Adjunto que se hará de forma similar a la de los magistrados. La Constitución de la República, en su artículo 233, establece que le corresponderá a una Junta Proponente evaluar a los postulantes y nominar a los cinco candidatos idóneos para ocupar el cargo. Estos cargos son los responsables del manejo del Ministerio Público donde surgen las investigaciones hacia funcionarios sobre corrupción y narcotráfico.
La integración de dicha Junta Proponente, deberá integrarse por el presidente de la Corte Suprema de Justicia (quien la presidirá) y un magistrado designado por el pleno; el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos; un representante de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras y un representante de una universidad privada; un representante del Colegio de Abogados de Honduras; y un representante de la sociedad civil.
Luego la junta entregará la lista al Congreso Nacional y los congresistas votarán con mayoría calificada (86 votos).
Una oportunidad para el país, según el experto en derecho internacional, Joaquín Mejía, sería lograr “tener personas (como fiscales) que sean comprometidas con la lucha contra la corrupción y la impunidad para que empecemos a ver signos contundentes de esa lucha contra la corrupción y la impunidad que tanto desea la sociedad hondureña”.
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¿Qué pasará con los magistrados?
Lester Ramírez de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) vaticinó que la futura Corte Suprema de Justicia “tendrá tensiones fuertes entre ellos mismos, así como sucede en el Congreso Nacional. Lo que uno puede esperar es que al final tengan que aprender a trabajar y a resolver los fallos judiciales”, dijo a Expediente Público.
“Creo que los magistrados van a ser más mediáticos que los que hemos visto en cortes anteriores. Creo que va a haber tensiones y problemas de trabajo en equipo, pero es natural, es decir, hay más intereses y hay más partidos”, afirmó.