*El Consejo Supremo Electoral (CSE), igual que en las elecciones generales de 2021, eliminó un bolsón importante de más de 700,000 electores del Padrón Electoral previo a los comicios municipales del 2022, pero no explicó por qué a la ciudadanía nicaragüense.
** Mientras la organización de sociedad civil Urnas Abiertas, evidencia las graves irregularidades del proceso como un asunto de “trámite”, dado que los cargos para alcaldes, vicealcaldes y concejales ya están “repartidos», los presidente de los partidos aliados del régimen no les importa las críticas.
Expediente Público
San Nicolás es un municipio del departamento de Estelí en el norte de Nicaragua, ubicado a unos 148 kilómetros de la capital, con un poco más de seis mil habitantes. Al igual que en otros territorios del país centroamericano, la población ha migrado por distintas razones y la población que queda no tiene interés de participar en las elecciones municipales del 6 de noviembre de 2022, debido a las irregularidades que empañan el proceso como la disminución de más de 700,000 votantes que salieron del Padrón Electoral.
Ronaldo Ruiz Lanuza es habitante de esa localidad y en procesos electorales anteriores participó como miembro del tendido electoral por el Partido Liberal Constitucionalista (PLC), pero este año no lo hará. Su nombre, sin su consentimiento, apareció como uno de los candidatos “fantasmas” del Partido Liberal Independiente (PLI) y por eso insiste que no hay razón para participar en los comicios porque no hay “condiciones”, afirma en entrevista con Expediente Público.
“No hay razón para participar en política, porque no tenemos las condiciones y es andar perdiendo el tiempo (…) Dónde vamos ir a denunciar esto, ellos son cómplices, por lo menos lo que es el PLI, APRE y ALN trabajan con el Frente (Sandinista), aun el PLC”, dijo Ruiz Lanuza en entrevista con Expediente Público.
Para este proceso municipal, el Consejo Supremo Electoral (CSE), cuyos magistrados responden a los intereses del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, presentó un Padrón Electoral con 755,450 votantes menos con respecto al que se utilizó en las elecciones generales de 2021.
Partidos aliados no se interesan
El pasado 22 de septiembre, el CSE entregó a los partidos y alianzas de partidos políticos el Padrón Electoral definitivo que habilita oficialmente a 3,722,884 ciudadanos para ejercer su derecho al voto el 6 de noviembre cuando se elige a alcaldes, vicealcaldes y concejales.
La cifra es menor en comparación al Padrón Electoral que se usó en las elecciones generales de 2021, cuando 4,478,334 nicaragüenses fueron habilitados.
Mario José Asensio Florez, presidente del Partido Liberal Independiente, organización política señalada de ser colaboracionista del régimen, al ser consultado evadió dar una respuesta concreta a la disminución del Padrón Electoral.
“Para serle franco, estamos trabajando sobre la marcha con las candidaturas y las cosas que nos están proporcionando, las generalidades en sí no las podría precisar exactamente lo que conlleva en sí”, dijo Asensio Florez.
Padrón Electoral poco confiable
El artículo 40 de la Ley Electoral de Nicaragua, Ley 331, establece la “depuración permanente del Padrón Electoral” y en ese sentido son pocas las oportunidades que tienen los nicaragüenses para no desaparecer de ese registro de ciudadanos activos para votar.
Según la ley, solo los “nicaragüenses que han ejercido su derecho al voto al menos una vez en el periodo comprendido entre las últimas dos elecciones generales o cualquiera de los otros procesos electorales que se hayan producido entre ellas”, pueden votar.
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Ante la gran cantidad de ciudadanos que salieron del Padrón, Carlos Canales, presidente del partido Alianza por la República (APRE), dijo a Expediente Público, que la depuración del Padrón Electoral es un proceso “normal” frente a cualquier elección.
“Se dan depuraciones de muchas cosas, de fallecidos, de algunos que no han votado en las últimas dos elecciones y entonces por eso a veces baja y a veces sube el número. Aquí hay muchas personas que tal vez no votan o tal vez se han ido del país y no avisan, el Padrón tiene que ser exacto”, insistió Canales.
CSE no explica eliminación de electores
En un país como Nicaragua, sin embargo, donde el secretismo oficial impera en todas las estructuras de los Poderes del Estado, manipulados por el régimen Ortega y Murillo, no se conocen las causas reales de esa disminución y marca una de las tantas irregularidades reflejadas en los comicios municipales.
El tribunal electoral no informa a la ciudadanía cuántos ciudadanos nicaragüenses conforman el padrón electoral pasivo, compuesto por aquellos que no ejercieron su derecho al sufragio en las últimas dos elecciones.
La Misión de Acompañamiento Electoral de la Organización de los Estados Americanos en Nicaragua, en 2017, señaló que tener un padrón electoral confiable depende de la calidad de la información en el proceso de cedulación y del registro civil de las personas que es la oficina encargada de elaborar las actas de nacimiento, defunciones, rectificaciones y reposiciones.
“La confianza en las instituciones es un elemento fundamental en todos los procesos electorales”, insistió en ese entonces la misión de la OEA.
Migración masiva influye en disminución
La desaparición de votantes del Padrón Electoral ha sido una irregularidad recurrente del Consejo Supremo Electoral. En 2021, hubo una reducción de 748, 407 ciudadanos hábiles para votar con respecto a los 5,095,747 de ciudadanos aptos para votar que registraban en 2017.
En el municipio de San Nicolás las personas están migrando, principalmente a Estados Unidos y Costa Rica, dijo Ruiz Lanuza.
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“Un grupo se fue porque participaron en las marchas y manifestaciones que hubo anteriormente en el 2018, se fueron a los Estados Unidos y otros a Costa Rica, la gente se ha ido porque no hay trabajo”, insistió este ciudadano.
Según el servicio de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP por sus siglas en inglés) en lo que va de este año, 108,010 nicaragüenses fueron retenidos intentando entrar a ese país, revelando que la migración masiva es constante. Mientras que, en Costa Rica el número de refugiados y solicitudes refleja que más de 150,000 personas se han desplazado, según cifras a la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (UNHCR-ACNUR por sus siglas en inglés).
Elecciones con menos Juntas Receptoras de Votos
Para estas elecciones municipales, el CSE también redujo las Juntas Receptoras de Votos (JRV), que son los lugares habilitados en cada municipio para que los ciudadanos acudan a ejercer su derecho al voto.
La reducción tiene su origen en la reforma electoral que aprobó la Asamblea Nacional el 5 de mayo de este año, seis meses antes de los comicios municipales y que allana el camino para el régimen, que actualmente tiene el control de 135 alcaldías.
Este año serán habilitadas en los municipios 7,931 JRV, es decir 5,528 menos que las 13,459 que se establecieron durante los comicios generales de 2021.
Durante los comicios generales de 2021 se eliminaron 1,122 en relación a los comicios del 2016 cuando autorizó 14, 581, lo que limitó la participación de la población, recordó Ruiz Lanuza.
“En nuestro municipio, que son municipios pequeños, anularon tres Juntas Receptoras de Votos (en 2021), incluyendo las más grandes del municipio lo hacen con la intención de que la gente no participe para así tener ellos la ventaja”, señaló Ruiz Lanuza.
Reforma solo beneficia al FSLN
La reforma incrementó de 400 a 600 el número de electores que tienen derecho a acudir a ejercer el voto en las JRV.
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La directora de Redes Ciudadanas de Urnas Abiertas, Ivannia Álvarez, explicó que debido a lo tardío que fue la convocatoria para elecciones y al no ser un proceso transparente, se evidencian muchas más irregularidades, dijo Álvarez.
“Les interesa muy poco la participación ciudadana, les interesa muy poco también que los denuncies, no les interesa verse al descubierto, hay un descaro total por parte de los colaboracionistas y hay un apoyo al régimen”, manifestó Álvarez.
El CSE en el avance de la farsa electoral juramentó a los miembros de los Consejos Electorales Departamentales (CED) y Consejos Electorales Regionales (CER) y procederá en estos días a formalizar el nombramiento de los integrantes de las JRV.
“Aquí los cargos ya están repartidos, aquí solamente falta el trámite y eso ha despertado una indignación por parte de la población sobre el uso de los recursos de nuestros impuestos para pagar estos trámites para reembolsar a los partidos”, puntualizó Álvarez.
De acuerdo al calendario electoral, el próximo 12 de octubre inicia la campaña electoral, pero a la fecha el CSE no informa sobre el proceso de impresión de las boletas.
