Brian Nichols: “Es difícil imponer la democracia desde fuera de Nicaragua” 

Brian Nichols: “Es difícil imponer la democracia desde fuera de Nicaragua” 

* Entrevista exclusiva de Expediente Público con Brian Nichols, el exsubsecretario del Departamento de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental de EE.UU. 

** Nichols reflexiona sobre sus cuatro años de trabajo a cargo de los intereses de Estados Unidos, y los retos que planteó luchar con las crisis de Nicaragua y Venezuela.  


Expediente Público / Washington DC

El exsubsecretario del Departamento de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Brian Nichols, ve difícil recuperar la democracia en Nicaragua sólo con la presión externa. 

Si bien las sanciones han dado algunos resultados sobre todo para liberar a los presos políticos, la presión externa no ha ido más allá. 

Nichols, quien se jubiló del servicio exterior el 31 de diciembre de 2024, luchó durante la administración del expresidente Joe Biden con las crisis sociopolíticas de Nicaragua, Venezuela y Cuba. Brindó una entrevista exclusiva a Expediente Público en Washington DC. 

El exdiplomático apuntó que las sanciones sólo pueden tener efecto real si existe un sólido compromiso para hacerlas cumplir por los países vecinos de Nicaragua y Venezuela. 

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La pareja de dictadores en Nicaragua, Daniel Ortega y Rosario Murillo también han ignorado las resoluciones de la Organización de Estados Americanos (OEA). El país abandonó ese foro en 2021 y en 2025 se retiró del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU). El régimen también rechaza o no responde los continuos informes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). 

¿Qué hacer con Nicaragua?

«Es difícil imponer la democracia desde fuera, con los países de la región si se puede hacer más. Sin embargo, en el caso de (Daniel) Ortega y (Rosario) Murillo ellos han resistido las declaraciones y resoluciones de la OEA, de la ONU, de la Comisión de Derechos Humanos, a ellos no les importa las opiniones del resto del mundo”, opina Nichols. 

Ortega y Murillo han legitimado la figura del matrimonio presidencial con las reformas constitucionales aprobadas a finales de enero, que les da amplios poderes incluso para nombrar a dedo a los presidentes de la Corte Suprema de Justicia y del Consejo Supremo Electoral, a los del Ejército y demás entidades. 

En contexto: Blinken y Nichols comprometidos en apoyar el retorno a la democracia en Nicaragua, Venezuela y Cuba

El poder limitado de las sanciones 

“Las sanciones funcionan cuando la mayoría de los países, especialmente los países fronterizos, las respetan. En el caso de Nicaragua y de Venezuela sí han empujado algunos cambios”, dijo Nichols. 

“Sin embargo, cuando hay una pequeña cúpula de gente a la que no le importa lo que pasa con la inmensa mayoría de las personas, pueden resistir las sanciones por mucho tiempo”, apunta. 

Brian Nichols: “Es difícil imponer la democracia desde fuera de Nicaragua” 

El exfuncionario expone, además, la dificultad que ha planteado el régimen a cuatro administraciones continuas en Estados Unidos que “han visto degradarse cada vez más la situación de Nicaragua». 

Mientras la Casa Blanca cambia de inquilinos, la mansión presidencial de Managua sigue inamovible por un matrimonio “que no le importa el sufrimiento de su pueblo”, sostuvo. 

El Departamento de Estado considera que el caso de Nicaragua expone con claridad la decisión del régimen de “huir y esconderse de sus continuos abusos de derechos humanos”. Esos abusos incluyen condenas a presos políticos y represalias contra las mínimas muestras de oposición. 

Brian Nichols participó como orador principal en días recientes en el Séptimo Foro Anual de Desafíos de Seguridad en América Latina, en Washington DC, realizado en la sede de la Escuela de Estudios Internacionales Avanzados (SAIS) de Johns Hopkins University, en la que se desempeña como profesor.  

Rubio, oportunidad para América Latina 

Para Brian Nichols la región debe aprovechar un momento “bueno y favorable” con la llegada del secretario de Estado, Marco Rubio, quien al tomar posesión del cargo inició su primera gira por Centroamérica a principios de febrero, donde enfatizó sus compromisos con la región. 

Brian Nichols enfatiza que, por primera vez, el Departamento de Estado cuenta con una nómina de altos funcionarios con un sólido conocimiento sobre América Latina. Destaca también la figura del propio secretario Marco Rubio, quien se identifica con la región por ser hijo de inmigrantes cubanos radicados en Florida y hablar un español impecable. 

“Algo favorable es el interés del secretario (Marco) Rubio en la región, es alguien que conoce la región muy bien y que quiere la región ha traído con él a otros expertos. El subsecretario del Departamento de Estado (Christopher Landau) ha sido embajador en México, y hay otros oficiales alrededor del secretario que conocen bien a la región”, dice. 

Brian Nichols: “Es difícil imponer la democracia desde fuera de Nicaragua” 

Un punto importante para Nichols es que “jamás hemos tenido tanta gente de alto rango en el Departamento de Estado tan experta en la región y es algo muy favorable”. 

Sin embargo, faltaría ver qué sucede en el gran andamiaje de la política exterior de Estados Unidos bajo el liderazgo del presidente Donald Trump, la que tendría que perfilarse en los próximos meses. 

Según exsubsecretario Nichols, deberían darse más visitas de Rubio a Latinoamérica, a la vez que presidentes y cancilleres latinoamericanos visiten Washington para abordar los temas de interés común con el presidente Trump. 

Además: Subsecretario Brian Nichols: Estados Unidos sigue atento a lo que sucede en Centroamérica

En la mira: migración, seguridad e influencia China  

Por ahora, la administración Trump concentra su interés en Latinoamérica en temas de migración, seguridad y en recuperar el control del Canal de Panamá, como parte de una estrategia para restarle influencia a su principal adversario geopolítico: China. 

Durante su primer discurso ante el Congreso el 4 de marzo de 2025, el presidente Trump enfatizó en cómo su gobierno está liderando la “liberalización” de Estados Unidos al expulsar a inmigrantes y apuntar al objetivo del Canal de Panamá. 

Ante el pleno del legislativo federal en el Capitolio, Trump dijo que Marco Rubio tiene las misiones de afinar la recuperación del canal. 

“Vamos a recuperar el Canal de Panamá y hemos empezado a hacerlo ya (…) fue construido el Canal de Panamá por americanos para americanos”, dijo Trump aludiendo a la presencia china en el istmo. 

El gobierno panameño ha rechazado una y otra vez las declaraciones del mandatario estadounidense y rechaza además que China tenga control sobre la infraestructura interoceánica por lo que califica de “mentiras” las afirmaciones del presidente Trump. 

De interés: EE. UU. reitera que no olvidará al pueblo de Nicaragua

La vista hacia adentro 

Para el exsubsecretario Nichols, como contrapunto al activo principal de Marco Rubio hacia Latinoamérica, el enfoque de la Casa Blanca hasta ahora es el tema económico y frenar las migraciones. 

“El enfoque de Trump es más que nada la economía de Estados Unidos, con transacciones, en qué se puede ganar en cada transacción con la otra parte y encima de todo la migración que quieren frenar completamente”, afirmó. 

Ese panorama genera una gran incertidumbre —como en el resto del mundo—, pero los casi tres meses transcurridos desde el regreso de Trump a la Casa Blanca ya ofrecen pistas sobre lo que podría suceder en los próximos cuatro años.  

La nueva realidad en Washington obliga a reajustar las consignas de defensa de la democracia y respeto a los derechos humanos dentro de la política exterior de Estados Unidos. Mientras tanto, los países de la región deberán afrontar por sí mismos ciertas situaciones, al tiempo que se adaptan a los cambios globales.