* Un documento suscrito entre los gobiernos de El Salvador y China planeó desde 2016 la intervención en el Golfo de Fonseca para convertirlo en una zona económica de desarrollo.
** La carta de entendimiento, cuya copia tiene Expediente Público, muestra el interés de Beijing en dicha zona, donde ahora el gobierno de Nayib Bukele expande el proyecto Surf City.
*** Con la construcción del Aeropuerto del Pacífico, familias de pescadores denuncian desalojos sin que los indemnicen.
Eric Lemus / Expediente Público
La obra más importante del segundo quinquenio del Gobierno de Nayib Bukele empezó a fraguarse hace ocho años cuando estuvo en el poder el partido Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), que creó las condiciones para favorecer los intereses de China en este país centroamericano.
Con la expansión del emblemático proyecto del presidente salvadoreño, Surf City 2, se ha desalojado a unas 225 familias que viven en las comunidades aledañas al Golfo de Fonseca, donde también está prevista la construcción del Aeropuerto del Pacífico.
La nueva terminal aérea operará en el departamento La Unión, 205.5 kilómetros al este de San Salvador, para convertir la región oriental del país en punto de referencia internacional.
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El proyecto aeroportuario buscaría dinamizar el tráfico aéreo en una zona con potencial turístico y donde el Gobierno de China ofreció crear una Zona de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDE).
Expediente Público obtuvo una copia de una carta de entendimiento suscrita el 23 de agosto de 2016 durante el Gobierno del expresidente Salvador Sánchez Cerén (2014-2017) que muestra la hoja de ruta que seguirían en función de los intereses de Beijing.
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Sánchez Cerén ahora está nacionalizado en Nicaragua y es reclamado por la justicia salvadoreña por actos de corrupción.
El documento fue firmado por el entonces vicepresidente Óscar Ortiz, también dirigente del antiguo partido gobernante FMLN, y Jiang Yi, presidente de la empresa china Beijing Asia-Pacific Xuanhao Project Investment Company Limited.
El profesor Evan Ellis, quien es investigador de estudios latinoamericanos en el Instituto de Estudios Estratégicos de la Escuela de Guerra del Ejército de EE. UU., resalta a Expediente Público que “el Golfo de Fonseca se puede entender como una zona estratégica en el avance de China en Centroamérica”.
Ellis describe que la ubicación tiene una importancia semejante a la que ofrece el canal de Panamá; pero, con la salvedad que acá el objetivo es lograr “mejor acceso a los mercados de Honduras, Nicaragua y El Salvador”.
Desalojos forzados
El líder comunitario José Elmer Martínez confirmó a Expediente Público que el Gobierno salvadoreño los desalojó en diciembre al cierre de 2024 de las comunidades Flor de Mangle y Condadillo, en Conchagua, municipio de La Unión Este.
Los dos pequeños poblados eran habitados por alrededor de dos mil habitantes que sobrevivían como pescadores artesanales y de la agricultura, pero advierten que todo el paraje está cambiando drásticamente y “alterará las áreas naturales protegidas de los mangles”.
El Gobierno acordó la expropiación a través de ocho mil dólares por manzana como compensación a las familias afectadas por la construcción del Aeropuerto del Pacífico; aunque hasta este marzo de 2025 no ha efectuado ningún pago, según denunciaron los campesinos.
“Vinieron representantes del Ministerio de Vivienda a hablar con nosotros, pero hay irregularidades porque no están cumpliendo con su palabra”, alertó Martínez, quien es presidente de la comunidad Flor de Mangle.
El precio de la manzana de tierra en el mercado oscila entre US$24,000 y 40,000, conforme la utilidad comercial.
“Las zonas agrícolas se venden de US$24,000 en adelante, mientras que las más caras son las tierras en las costas porque son las de potencial turístico”, detalla a Expediente Público Ángel Flores, que representa al Movimiento Indígena para la Integración de las Luchas de los Pueblos Ancestrales de El Salvador (MILPA).
En contexto: Surf City 2 devora reserva natural en El Salvador
A principios de 2024, por ejemplo, la comunidad que vive en torno a la playa El Icacal, una de las zonas paradisíacas de la costa este de El Salvador, también fue sistemáticamente presionada por personal de seguridad privada con el objetivo de que abandonen sus casas.
La organización MILPA denunció a Expediente Público diversos casos de intimidación e, incluso, violencia física contra algunos residentes.
Extinción de dominio
La Coalición Nacional para el Derecho a un Ambiente Sano (CONADAM) informó a Expediente Público que el Gobierno está aplicando la Ley Especial de Extinción de Dominio y de la Administración de Bienes de Origen o Destinación Ilícita.
“Es una ley que facilita la expropiación de tierras de manera expedita, bajo el concepto de que las tierras son de interés público, a pesar de que está al lado de una de las principales áreas naturales protegidas”, dijo Flores.
Por otra parte, la información sobre la construcción del Aeropuerto del Pacífico es opaca y no existe ningún documento que muestre el impacto ambiental de la zona costero-marina.
¿Cuánto es el presupuesto el Aeropuerto del Pacífico?
El proyecto, anunciado como una de las principales apuestas del gobierno salvadoreño para fortalecer la conectividad aérea y el desarrollo económico en la zona oriental del país, ha avanzado lentamente en su ejecución presupuestaria.
El Gobierno de Bukele asignó un presupuesto de 19,5 millones de dólares en 2024 para la construcción y equipamiento del Aeropuerto Internacional del Pacífico, ubicado en el departamento de La Unión, según comprobó Expediente Público en la información oficial de Transparencia Fiscal del ejecutivo.
La Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA) es quien administra el proyecto, sin embargo, los documentos oficiales revelan que del presupuesto asignado solo se ejecutaron 2,7 millones de dólares. No hay información que permita conocer las razones del bajo nivel de ejecución de inversión ni sobre los plazos concretos para la construcción de la obra.
En el Presupuesto General de la República de 2025 no se logró identificar partidas para el proyecto del mencionado aeropuerto en el rubro de inversión pública.
No toman en cuenta a habitantes
“Este proyecto violenta derechos, como a la consulta de los habitantes, al medio ambiente, pues abarca una reserva forestal de mangle, además del impacto tanto en el ámbito económico como social”, lamenta el ambientalista.
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Los afectados reiteraron que el Gobierno sigue adeudándoles la suma con quienes pactó, mientras avanza la maquinaria y expulsa a quienes se opusieron.
La primera piedra del Aeropuerto del Pacífico fue colocada por el presidente Nayib Bukele el martes 25 de febrero de 2025. El ejecutivo promete que la nueva terminal aérea tendrá una extensión de 2,400 metros y contará con dos puertas de aterrizaje.
Además, proyecta recibir 300,00 pasajeros con un promedio de 2,000 vuelos al año.
“El precio de las tierras se ha disparado por la construcción que viene y no se encuentra nada por menos de US$60,000 dólares. ¿Qué vamos a comprar y a dónde nos vamos a ir?”, pregunta uno de los desalojados.
China tras bambalinas
La carta de entendimiento suscrita en 2016 es una hoja de ruta a largo plazo para convertir toda el área en torno al Golfo de Fonseca, que limita con el océano Pacífico y los vecinos Honduras y Nicaragua.
En ella, China planeó establecer una inversión sustancial para “crear o administrar una o más Zonas Económicas Especiales en El Salvador”.
El proyecto, con una inversión de US$23 mil millones de dólares, cubriría 2,787 kilómetros cuadrados, que equivale al 13% del territorio salvadoreño.
Un exfuncionario que participó en las conversaciones relató a Expediente Público “que el personal de la antigua PROESA (Promover El Salvador) trabajaba para la vicepresidencia de la República y llevó todo a un ritmo lento, lento, pero minucioso”. Es decir, la fuente opina que “quizás sabían que no sería ejecutado por el Gobierno de Sánchez Cerén, sino por Bukele”.
La fuente, que prefiere identificarse como Beta, recuerda que el plan incluye la creación de “una zona industrial para materiales de construcción y electrónicos; un área portuaria, con ampliación del Puerto La Unión, una zona aeroportuaria, de comercio internacional, agropecuaria, turismo, centro financiero y una zona educativa de alto nivel tecnológico e innovación”.
“Honestamente, cuando veo en qué dirección geográfica avanza el proyecto actual de Bukele también veo que es la ruta (que planteó) China abarcando la zona costera de (los departamentos) Usulután, San Miguel y La Unión, donde el Golfo de Fonseca es estratégico”, opina Beta.
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“Un complejo logístico”
El profesor Ellis trae a cuenta que las condiciones actuales de los tres países que rodean al Golfo son favorables en relación con 2016, cuando fue suscrita la carta de entendimiento bajo el mandato de Sánchez Cerén.
El académico estadounidense destaca a Expediente Público que Nicaragua, Honduras y El Salvador mantienen relaciones diplomáticas con la República Popular China en lugar de con Taiwán, y los tres gobiernos apoyan a China continental como observador permanente ante el Parlamento Centroamericano (Parlacen). Además, Beijing se ha constituido en un aliado político de estos países.
“El Golfo de Fonseca es importante entenderlo como un complejo de logística con sus interconexiones entre el (océano) Atlántico y Pacífico y las oportunidades que ofrece a China en tiempos de guerra como en otros momentos, dado las relaciones políticas y militares estrechas que tiene especialmente con los gobiernos de Nicaragua y Honduras”, puntualiza Ellis.
El catedrático del Instituto de Estudios Estratégicos de la Escuela de Guerra del Ejército de EE. UU., además, recuerda la compra de la mitad de la isla Perico por el ciudadano chino-salvadoreño Bo Yang poco después que El Salvador abrió relaciones políticas con Beijing.
El señor Bo efectuó la compraventa de 106 manzanas de tierra en noviembre de 2019, aunque nunca visitó la propiedad que adquirió y que está ubicada frente al Golfo.
Expediente Público visitó el islote donde residen 40 familias que viven en extrema pobreza. Una de las residentes relató que una vez avistaron una lancha con personas de aspecto asiático, pero no desembarcaron. “Nunca han venido a ver lo que compraron”, dijo la mujer.
La insignia presidencial
Hace dos años, Bukele inauguró el comienzo de las obras de infraestructura vial en el este del país con un tramo de carretera de 13.6 kilómetros para conectar los departamentos Usulután y San Miguel.
El evento fue organizado el 11 de agosto de 2022 en las cercanías de una formación rocosa conocida como “La ventana”, aledaña a Punta Mango, una de las playas menos frecuentadas por capitalinos y que es un punto de referencia estética entre la población del este de El Salvador.
“Este es un territorio abandonado por todos los gobiernos pasados; tenemos acá una de las playas más impresionantes del país”, dijo cuando echó a andar la obra.
Surf City abarca al menos cuatro fases y pretende la creación de un circuito de playas que atraiga el turismo internacional.
“Me decían los surfistas que es de las mejores playas para surfear del mundo. No hay ni siquiera una calle para acceder a ella, esta calle es de tierra, no solo no se desarrolla la playa Punta Mango, sino las playas de la zona”, reprochó Bukele en aquella intervención.
El plan empezó en 2019 como parte de la “Estrategia Nacional de Desarrollo del Turismo del Surf en El Salvador” para desarrollar la llamada “Franja del Pacífico”.
Pero los pobladores temen que en 2025 no tendrán un lugar donde vivir y que serán el efecto colateral de lo que implica la puesta en marcha del proyecto estrella del gobierno de Bukele.
