En su primer día como mandataria, Xiomara Castro nombró a sus primeros cuarenta funcionarios, un gabinete conformado por nuevos y viejos perfiles, en su mayoría, figuras históricamente leales a los Zelaya Castro. Se trata de un equipo que podría considerarse ecléctico y nepotista, con algunos nombramientos que rozan con la ilegalidad.
En este reportaje especial Expediente Público expone cómo el nuevo gabinete también es señalado por no ser paritario, con apenas 25% de los puestos asignados a mujeres, también es una combinación de funcionarios principiantes y experimentados, no todos con perfiles académicos afines a sus nombramientos.
¿Qué puede esperarse de este equipo conformado por la pareja presidencial? ¿Son ellas las personas idóneas para responder los retos y desafíos de la sociedad hondureña?