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Alonso Illueca: China usa la CELAC como contrapeso a la democracia

* China se vale del impulso de los regímenes de Cuba, Venezuela y Nicaragua en la Celac para imponer su estrategia permisiva de corrupción y desprecio a la democracia, advierte experto en Derecho Internacional.

* * Varios países de la región están en el campo de batalla entre la defensa de valores democráticos y la tentación de caer en la visión china de un orden de antivalores.


Expediente Público

China está utilizando a la Comunidad de Estados de Latinoamérica y el Caribe (Celac) como un instrumento geopolítico para establecer un orden paralelo de antivalores, con el apoyo de los principales regímenes autocráticos de la región, advierte el especialista en Derecho Internacional, Alonso Illueca.

“Los intereses de la República Popular China en la Celac se resumen básicamente en tratar de despuntar el orden regional construido a través de la Organización de Estados Americanos (OEA) y construir uno paralelo”, sintetizó el académico panameño, en entrevista con Expediente Público.

“Es un esfuerzo que se focaliza en despuntar los valores como democracia, derechos humanos y transparencia, y hacer un ecosistema muchísimo más amigable para regímenes autoritarios que violan derechos humanos de forma sistemática”, agregó.

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¿Por qué la Celac?

Además, estos estados llevan a cabo actos de corrupción de forma sistémica e incluso “tratan de implantar o de establecer cleptocracias”, explicó.


Illueca es miembro de la Junta Directiva de la Fundación para el Desarrollo de la Libertad Ciudadana – Capítulo Panameño de Transparencia Internacional. Explica que el régimen de Nicaragua, de Venezuela y de Cuba, son los principales Estados que lideran el régimen de la Celac, un sistema “muchísimo más amistoso a las autocracias extracontinentales como la Federación Rusa y la República Popular China”.

Alonso Illueca: China usa la CELAC como contrapeso a la democracia

El experto señala que cuando se analiza el índice de la percepción de la corrupción y el de libertad de Freedom House, uno se da cuenta de lo que persigue China a través de la Celac es promover estructuras de corrupción, de violaciones de los derechos humanos y autocracias.

“China promueve una visión alterna del orden internacional basado en reglas que es favorable a la adquisición de territorios por la fuerza militar y también a la instauración de regímenes autoritarios”, señala.

Para Illueca, “lo que buscan estos Estados a través de regímenes alternos como Rusia y como la República Popular China, es básicamente presentar una contrapropuesta al orden que fue ideado y creado con el aval de los Estados Unidos de América”.

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Sin transparencia

Explica que la estrategia de China para influir en América Latina a través de la Celac se ha desarrollado a partir de la llegada de Xi Jinping al poder, quien propone construir un nuevo orden mundial.

“Y en eso la Celac tiene un rol fundamental, porque a diferencia de la OEA, no es una institución del Derecho Internacional, es un foro informal, no están creados mediante tratados, a diferencia de la OEA que tiene la Carta de Bogotá”, indicó Illueca.

El experto en Derecho Internacional advierte que Pekín ha creado el denominado foro China-Celac “en donde de forma bastante opaca, sin transparencia, se establecen mecanismos de cooperación económica, sin ningún tipo de rendición de cuentas”.

“No sabemos si en el marco de la cooperación China-Celac, Argentina ha recibido una cantidad específica de fondos o si todos los fondos se han ido para Bolivia o todos los fondos se han ido para Colombia o para Panamá. Eso no lo sabemos hasta el sol de hoy”, señaló Illueca.

El experto manifestó que hay un acuerdo de cooperación estratégica de 2022-2024. “En la práctica no hemos encontrado una rendición de cuentas específicas y data que nos permita dilucidar si este esfuerzo narrativo de promover a la Celac va más ahora hacia la parte operativa e incluye cooperación en el”.

Alonso Illueca: China usa la CELAC como ente paralelo a mecanismos democráticos

Las autocracias sin control

Illueca sostiene que el objetivo de las autocracias en la Celac es retrotraer el sistema regional a una etapa post orden internacional basado en reglas, donde las autocracias puedan hacer lo que les da a bien, dentro de sus propias jurisdicciones, y violar sistemáticamente los derechos humanos, instaurar regímenes autoritarios y llevar a cabo a diestra y siniestra actos de corrupción.

“Entonces, por una parte, tenemos un orden regional que le dice a los Estados no puedes hacer estos actos que tú quieres llevar a cabo y por otra parte tienes un orden que es más permisivo”, señala.

Y en eso es clave el papel de China, que irónicamente es un país observador en la OEA.

Pero Illueca advierte que la estrategia de China pasa por participar en la OEA, donde sus contribuciones representan menos del 2% del total de todos los Estados observadores.

Por otra parte, señala que se busca sabotear los esfuerzos que hace la Organización de Estados Americanos.

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“La OEA tiene iniciativas contra la corrupción, pues bueno, China favorece que esas iniciativas no sean del todo exitosas, tiene iniciativas para promover la democracia, pero le dice a Venezuela y le dice a Nicaragua, salte de la OEA”, afirmó.

La OEA está herida

El problema es que, según Illueca, la OEA en este momento tiene una herida significativa. “No es la herida de muerte, pero sí tiene una herida bastante profunda”.

Esto se debe a la salida de Venezuela y Nicaragua, que se veían “mejor servidos” dejando de participar en el organismo hemisférico, donde priva “el orden internacional basado en reglas”, indicó el experto.

Illueca criticó que democracias de la región como Brasil, Chile y México, sigan lidiando con esos regímenes autocráticos, pese a su pobre récord en materia de Derechos Humanos, transparencia y lucha contra la corrupción.

“Muy a pesar de esto, siguen lidiando con ellos, entrando en relaciones comerciales, entrando en cooperación directa y de una u otra forma, dejando a entrever que el orden regional que se construyó a partir de la OEA, pues pareciera ser una criatura del pasado”, advirtió.

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China: sabotear organismos e instituciones

Illueca reflexiona sobre la estrategia de China por desplazar el orden internacional que promueve los Estados Unidos y recuerda cómo lo desplazó de su primacía en el orden regional asiático.

“Esa estrategia pasaba por dos esquemas. El primero, despuntar el orden que Estados Unidos había construido, básicamente sabotear. ¿Y cómo lo saboteaban? Participando de las instituciones estadounidenses, las que Estados Unidos había contribuido a forjar y, por otro lado, tratando de construir un orden alterno”, explica.

China hace lo mismo ahora a través de la Celac.

El campo de batalla

En medio del predominio de las autocracias, Illueca señaló que debe tomarse en consideración a países que están en el campo de batalla de las dos visiones.

“Hay un punto medio, un grupo de Estados que yo identifico que incluyen a México, Honduras, Guatemala, El Salvador y Bolivia que fácilmente son identificables como campos de batalla”, indica Illueca.

Según el experto, estos son los países que conforman la lucha por el orden regional que se estructuró hace más de 50 años en base a la OEA. Y están también dentro “del orden regional alterno que está tratando de construir China a partir de los antivalores, a partir de la autocracia, a partir de los actos de corrupción y a partir de las violaciones a los derechos humanos”.

Honduras y la Celac

Illueca señala a Honduras, con la presidenta Xiomara Castro, como un caso emblemático.

Castro será anfitriona en los próximos días de una reunión regional de la Celac y otra del Foro de São Paulo, el 27 y 28 de junio, que agrupa a los partidos de izquierda radical del continente.

“Uno tiene que nada más analizar el Índice de Percepción de la Corrupción y darse cuenta del puntaje muy bajo que tiene Honduras y también el Índice de Libertad en el mundo, donde se cataloga como un país parcialmente libre”, precisó.

Honduras se encuentra en el puesto 154 de 180 países en el Índice de Percepción de la Corrupción. Su puntuación es de 23.

Del índice de Libertad de Prensa, Honduras se encuentra en el puesto 146 de 180 países, considerado en una situación muy grave para el ejercicio periodístico.

“Si eso lo analizamos en condición con los dos eventos regionales que están próximos a realizarse en Honduras, nos podemos dar cuenta de este campo de batalla de las ideas liberales, por un lado, y las ideas del autoritarismo latinoamericano en el otro”, sostuvo Illueca.

Advierte que “en este momento parecen estar triunfando la vertiente que favorece los actos de corrupción, la vertiente que favorece a las autocracias y la que favorece a las violaciones sistemáticas a los derechos humanos”.